"HAY MUCHA GENTE MALA"
- Marisín Silgado Psicóloga
- 26 ago 2020
- 4 Min. de lectura
Esta es la frase que más escucho cuando comparto mi experiencia laboral y cómo me han hecho salir de la Empresa. Me suelo quedar callada, sin saber qué contestar, y ¿les digo la verdad? Me cuesta mucho creer que sean "malas personas".
Hace poco tuve un debate muy acalorado sobre esto, a las 3 de la mañana, con mi marido (también psicólogo), que no entendía cómo después de "la conspiración" que han hecho, y cómo lo han organizado todo, yo todavía no termine de aceptarlo y de alguna manera lo justifique.
Yo: Sé que ahora mi verdugo cree que está haciendo lo correcto, protegiendo "su imperio" y a "sus súbditos", pero en un tiempo, se dará cuenta de que ha cometido un error, se arrepentirá y se sentirá fatal...
ÉL: (tono de voz serio, con enfado y preocupación) Cariño, ella sabe exactamente lo que está haciendo, lo ha organizado y calculado desde hace meses, no sé cuándo te darás cuenta. No le ha importado dañarte, mintiendo, con tal de ahorrarse dinero. Eso es de "malas personas".
Durante este debate, me recordó muchos momentos en los que "mi verdugo", me hizo daño de forma gratuita, incluso cuando estaba embarazada, que terminé dándome de baja laboral, después de varios días seguidos con ataques de ansiedad en el trabajo. Pudiera mencionar muchos momentos, pero ahora mismo no me apetece entrar en eso.
Sigamos reflexionando sobre la gente "mala". Desde que comencé mi experiencia profesional en 2006, tuve contacto directo con adolescentes y jóvenes que habían cometido delitos graves: homicidios, violaciones, robos con armas de fuego, tentativas de homicidio, en fin, actos brutales. Si leía los expedientes antes de conocerlos me imaginaba a pequeños monstruos. Pero al conocerlos, cuando lograba ver lo que había detrás de esas mascaras de violencia, veía niños heridos. Pequeños niños tristes y solos, que estaban sobreviviendo en una burbuja de violencia, donde impera la ley del más fuerte.
De todos los chicos que atendí en ese período, sólo recuerdo a unos cuántos, muy pocos, que realmente mostraban frialdad ante la vida y la dignidad de las personas, que parecía que disfrutaban haciendo daño, "pequeños psicópatas". Aún así, sentía tristeza y curiosidad, por conocer qué les tuvo que haber pasado en su corta vida, para comportarse de esa manera y cómo se les podía ayudar.
Ya sé que está visión va en contra de lo que piensa mucha gente, tuve muchos debates sobre esto durante esa época. Desde mi punto de vista, no hay nada que justifique la violencia, pero sí hay factores que la explican.
En ese periodo de mi vida tomé conciencia de que tenía la capacidad de conectar con el dolor de las otras personas, que podía ver más allá de lo que me mostraban. Les parecerá una tontería, pero siempre lo he considerado un "superpoder", que conlleva una gran responsabilidad.
Lo mismo me pasa con "mis verdugos" en el antiguo trabajo. Sé cómo algunas han llegado hasta ahí, entiendo por qué otras han decidido darle esa lectura a los hechos y han inventado historias: por trabajo, por mantenerlo y/o por conseguirlo. Una gran parte de "mis verdugos", participaron en el proceso de selección para sustituirme... ¿Coincidencia? No lo creo.
Pero lo que más me cuesta entender, es que esto lo hagan personas que están muy cerca. Personas con quienes compartes las dificultades del día a día, los problemas personales, los miedos, y hasta el coche. No entiendo cómo una persona que se ha estado yendo contigo en el coche durante tanto tiempo, y que haya comportado como "amiga", te pueda dar una "puñalada en la espalda".
Esto no sucedía ni con los jóvenes delincuentes con quienes trabajaba, hay códigos que se respetan. ¿Será esto lo que llaman "maldad", cuando pueden hacer este tipo de daño, sin inmutarse? Ufff... Me hierve la sangre, no logro entenderlo. Quizás porque en mi experiencia de vida, he tenido la suerte de tener amistades verdaderas y reales. Por supuesto que hemos tenido conflictos y nos hemos hecho daño, se ha hablado o no, pero se ha perdonado y hemos continuado.
También me ha ocurrido que hay amistades que se han distanciado, pero sin darme una "puñalada en la espalda". Las personas con quienes no he congeniado, lo sabían, y yo lo he vivido como un mutuo acuerdo: tú por tu lado y yo por el mío. No fingimos amistad, mantenemos la educación y ya está. Por eso no logro entender la postura de esa "verdugo".
Hace algunos años perdí una amistad del trabajo, me costó aceptarlo y me veía a mí misma intentando agradarle, preguntándole por su vida, hablando de la mía, forzando una relación que ya había terminado. Hasta que lo acepté. Entiendo el papel de este verdugo, he estado ahí. Tuve la oportunidad de hacerle lo que me están haciendo a mí, pero yo me negué a entrar en "ese juego", mira por donde, la vida nos coloca ahora del otro lado de la balanza, y ella sí que va "a matar". ¿Eso la hace una mala persona? No desde mi punto de vista, sólo me parece otra víctima del sistema tóxico, que lleva demasiado tiempo respirando ese aire.
Tuve la oportunidad de hacerle lo que me están haciendo a mí, pero yo me negué a entrar en "ese juego", mira por donde, la vida nos coloca ahora del otro lado de la balanza, y ella sí que va "a matar".
Entonces, ¿existen esas "malas personas"? He reflexionado mucho sobre esto, creo que la maldad existe, y que todos somos susceptibles de caer en ella, si se dan las circunstancias adecuadas y se pierde el autocontrol.
Definitivamente que hacemos daño a los demás, incluso sin darnos cuenta. Para mí, la diferencia está en la intención, la premeditación, el objetivo. En definitiva, el hacer daño con el fin de DAÑAR, ROMPER, ALECCIONAR, QUITAR LA DIGNIDAD. Y para eso, nos dejan de ver como personas, nos "cosifican", y así pueden hacer daño, sin sentir ningún tipo de remordimiento. ¿Les suena de algo eso? Sí, es una característica de los psicópatas.
Y ahora les pregunto, ¿tienen razón los me dicen que "mis verdugos" son malas personas? Saquen sus propias conclusiones.
No quiero terminar sin decirles que, desde mi punto de vista profesional, todos los seres humanos tenemos la capacidad de cambiar, incluso "las malas personas", sólo necesitamos motivación para hacerlo, esfuerzo personal y un acompañamiento profesional. Así que, no olviden, que si necesitan ayuda o conocen a alguien que la necesite, pueden contactarme.
¡¡¡GRACIAS POR LEERME!!!
Gracias por el apoyo y el cariño Viodelka Alvarado. 😘😘😘
Gente mala, si existen.De vez en cuando aparecen en nuestras vidas para retarnos y recordarnos de lo que estamos hechas. Ya estas lista para emprender un vuelo hacia la independecia.Si lo sabre yo,que te vi partir llena de metas, que has conquistado. La gente mala solo obtiene satisfaccion, si a quienes considera su objetivo de maldad le ofrecemos indicios de su eficaz veneno.