¡COMIENZA LA REVOLUCIÓN!

Aquí estoy otra vez, enfrentándome a mis sombras. Nunca pensé que conduciendo durante una hora y cuarenta y cinco minutos, mientras la peque duerme detrás, podría ser tan REVELADOR. Estando muy concentrada mirando a la carretera, de repente llegan a mí una avalancha de recuerdos. Situaciones concretas que mi memoria me había ocultado para evitarme sufrimientos. Y como si estuviese en el mejor momento de mi vida, me vienen de golpe. No me da tiempo de reaccionar cuando ya estoy llorando, sintiendo muy intensamente el dolor y la pena.

Confieso que siempre me he visto a mí misma como una buena persona, que intenta vivir acorde con sus valores. Sé que tengo muchos fallos, soy imperfecta, pero "buena" al fin y al cabo. Ahora reconozco que tengo que modificar mi concepto de personas "buenas" y "malas".

Hace unos días, una persona que trabajó en esa Empresa, me mostró lo que es ser UNA BUENA PERSONA realmente. Podía imaginar como irradiaba LUZ mientras leía sus palabras. Desde la bondad y la generosidad, me mostró de forma clara alguna de MIS SOMBRAS. Reconoció el daño que YO le había hecho mientras ejercía un puesto de mando en la Empresa, y entonces me dí cuenta: YO FUI UNA DE SUS VERDUGOS!! No puedo describir con palabras el dolor que sentí.

YO FUI UNA VERDUGO. Es más fuerte ahora que lo escribo y sale de mi cabeza. Yo ayudé a ROMPER a varias personas. ES HORRIBLE. Me duele tanto verme así y también imaginar que otras personas se pudieran estar sintiendo como yo, por MI CULPA, por ejercer un liderazgo tóxico, enseñado y promovido por la VERDUGO.

Agradecí mucho que esta BUENA PERSONA aceptara mis disculpas, fuera honesta conmigo y hasta me diera ánimos y me deseara lo mejor. Esa persona estuvo varios años viviendo entre "la caca", llegó a sentirse una "caca", pero logro NO ENSUCIARSE, y NO APESTAR a "caca". ¿Se entiende esto o se han perdido con tanta "caca"?

Yo sí me ensucié, y apestaba. Por eso me siento tan culpable, porque me alejé de mis valores. Sé que ya no soy la misma, "he abierto los ojos", pero eso no es suficiente para dejar de sentirme culpable. Por eso estoy haciéndome cargo de mis errores y por eso seguiré profundizando en mí y compartiendo el proceso.

En terapia me di cuenta que para ejercer un puesto de liderazgo en esa Empresa, hay que ser VERDUGO, ésa tiene que ser la actitud, es lo que promueven, disfrazado, obviamente. Me adapté a esa forma de trabajo y logré escalar en la Empresa, pero a costa de mi salud mental y la de otras personas.

Es por esta razón que en 2016 renuncié al puesto de mando que tenía, intenté que se cambiara la forma de liderar, pero sólo conseguí que mi verdugo pusiera el foco de atención en mí. Desde ese momento, me propuse intentar cambiar el ambiente en la Empresa, hablando mucho sobre esto para sensibilizar sobre la necesidad de hacer cambios, motivando a compañeras a que fueran honestas y expresaran su malestar... en fin, he hecho todo lo que se me ha ocurrido, ¿saben cuál ha sido el resultado? ¡ME HAN DESPEDIDO!.

Porque en esa Empresa, si expresas tu malestar por algo relacionado con la forma de trabajo o el ambiente, es que "no entiendes la herramienta terapéutica" o "no eres lo suficientemente madura emocionalmente", o "te falta profundizar más en tu vida y descubrir el bloqueo qué tienes", en fin, siempre es responsabilidades de las personas trabajadoras, los puestos de mando NUNCA asumen ninguna. Esto explica por qué algunas personas dejan de intentarlo y simplemente se RESIGNAN, se "adaptan" a esta forma de trabajo y al ambiente. Aceptan sin cuestionar, de vez en cuando protestan, pero sin mucha fuerza.

También hay otras personas que se han dado cuenta de este ambiente tóxico, han identificado a la VERDUGO y su influencia en todas las personas trabajadoras, y por eso han tomado la SABIA decisión de IRSE de la Empresa. Pero yo no fui una de ellas.

Reconozco, con vergüenza, que yo he intentado resignarme también, aceptar que así es el ambiente laboral y dejar de luchar para cambiarlo. He estado en reuniones donde "machacan" a alguna compañera, como si hubiera matado a alguien, por haber dejado la puerta abierta o no haber cambiado el papel higiénico del baño, y me he quedado callada. Pero también me sentía culpable por no haber actuado y me dolía ver cómo sufrían mis compañeras.

Ahora me doy cuenta de que me había puesto como objetivo cambiar esa forma de trabajo, he estado luchando durante estos últimos años para hacerlo. Y se preguntarán, ¿por qué gasté tanta energía en esto? Mi respuesta es simple: porque creo firmemente en la misión de esa Empresa, porque a pesar del daño hacia las personas trabajadoras, del mal ambiente laboral y de la VERDUGO, acompañan a la gente a cambiar su vida. Es una labor preciosa, un privilegio, que te cambia de muchas maneras. Es difícil, no les voy a mentir, pero merece el esfuerzo. Por eso me indigna tanto que la forma de trabajar de la VERDUGO estuviera estancando y paralizando todo el potencial que tiene la Empresa (que la constituyen las personas trabajadoras, no sólo la VERDUGO). No me parecía justo.

Darme cuenta de todo esto, analizarlo y compartirlo, ha hecho que vaya cogiendo cada vez MÁS FUERZA para tomar decisiones. Desde el principio tenía claro que quería LUCHAR por LIMPIAR MI NOMBRE, luego decidí que la LUCHA sería por recuperar el DINERO que me pertenece, pero ahora, he encontrado un NUEVO SENTIDO a esta situación, un sentido que me hace sentir PAZ en el alma. Por eso sé que éste es el camino correcto.

He descubierto que mi MISIÓN es dar a conocer este ambiente laboral tóxico, autoritario, que llega al maltrato hacia las personas trabajadoras, donde te van humillando constantemente hasta hacerte desconfiar de ti y perder tu dignidad. No quiero callar, eso me convertiría en CÓMPLICE, y yo ya he estado ahí. Esta manera tóxica de funcionar se ha implantado en la Empresa desde hace muchos años, antes de que yo llegara a ella, y se ha mantenido por muchas razones, una de ellas es porque las personas trabajadoras LO HEMOS PERMITIDO. Hemos callado y hemos alimentado al VERDUGO hasta convertirla en EL MONSTRUO que es ahora. Pero por mi parte, ESTO SE ACABO.

Me comprometo a poner todo "sobre la mesa", no volveré a callar por miedo, BASTA de ser cómplice, BASTA de sentirme culpable por no actuar coherente con mis valores. Al despedirme, me han libertado en muchas formas, y ésta es una de ellas. Ahora ya no temo a las represalias, ya no pueden hacerme más daño. Voy a defender no sólo mis derechos, sino los de todas las personas que han sido víctimas de ESA EMPRESA.

Con esta declaración de intenciones, comunico que HOY COMIENZA LA REVOLUCIÓN.

No digo "guerra", ni "lucha", sino algo más POTENTE, con más FUERZA. Seguramente no lograre que cambien la estructura y el "gobierno" de esa Empresa, pero dejaré mi semilla muy bien implantada, confió en que dará sus frutos cuando sea el momento adecuado.

Confieso que da miedo enfrentarse a una Empresa tan grande y con reconocimiento social y político, porque hacen una labor magnifica, no lo niego, pero se paga un precio muy alto, cuando se puede hacer de otras formas. Pero para eso, hace falta una REVOLUCIÓN.

Y HOY ES EL DÍA, yo ya he hecho mi jugada, sólo les diré: JAQUE... seguiré compartiendo.

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Duele mucho reconocer nuestras SOMBRAS, esa parte oscura que todos tenemos, y que forma parte de nosotros. Identificarla y reconocerla, nos ayuda a modificar, a crecer y a cambiar. Pedir disculpas no es suficiente para cambiar, ojalá con la intención bastara, pero no es así. Si identificas alguna sombra que estás intentando cambiar y no puedes, pide una cita, podemos ayudarte.

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